Preparación
Se cortan las berenjenas por la mitad a lo largo y se cuecen en abundante agua con sal durante 40 minutos. Se sacan y se escurren. Se vacían las cascaras, teniendo cuidado de no romperlas. Se pasa la pulpa por un pasapurés, y se colocan las cascaras en un recipiente de horno previamente untado con un poco de aceite.
Se pone aceite en una sartén al fuego, se añaden la cebolla y el ajo bien picados, se deja estofar un rato, se añade la carne y se rehoga con cuidado. Se agrega el vino y cuando éste se ha consumido, se incorpora la pulpa de las berenjenas mezclada con el pan rallado, la nuez moscada y el huevo batido. Con esta mezcla, se rellenan las cáscaras de berenjena. Se riegan con la mantequilla derretida y se meten a horno fuerte durante 10 minutos. Se sacan, se dejan enfriar y se colocan en un recipiente que deje poca cámara de aire y tape bien.
Se congelan y, cuando se quieran comer,se sacan media hora antes, colocándolas con una espátula en una fuente de horno.
Se rocían con un poco de mantequilla derretida, se meten al horno 15 minutos y se sirven.
Si no se van a congelar, han de permanecer en el horno 25 minutos. Se sirven con arroz blanco y espolvoreadas con perejil picado.